En meses anteriores Costa Rica estuvo a punto de recibir una donación de vacunas de Johnson & Johnson que estaban prontas a vencer.
La donación se gestionó a través del Colegio de Médicos y Cirujanos y el Gobierno de Estados Unidos, pero finalmente la organización nacional desistió de recibir tal donación por la falta de tiempo para transportar y aplicar cerca de 2 millones de dosis. Las vacunas posiblemente terminaron desechadas.