Probablemente los historiadores del futuro verán la decisión de invadir Ucrania como una de las decisiones más estúpidas, estratégicamente costosas y mal calculadas en la historia registrada, indistintamente de que pase. Por mucho que los defensores de Putin (la razón por la cual Putin puede tenerlos se me escapa pero existen) siempre quieran presentarlo como un astuto estratega que todo cuanto hace es exitoso, en parte porque por razones que desconozco desean que al Occidente en que viven le vaya mal, si medimos los resultados de la aventura bélica de Putin indistintamente de si logra conquistar toda Ucrania o no con cualquier punto intermedio, estas son poco favorables para Rusia y mucho para sus rivales.
-Fue un regalo electoral para Macron quien iba bajísimo en las encuestas y de pronto remontó. Distintas firmas le dan hasta 80% de probabilidades de ser reelecto. Sus principales rivales los ultraderechistas xenófobos de Le Pen y Zemmour se desplomaron por sus conocidos vínculos con Putin, el candidato de izquierda Melenchon culpó a la OTAN y se puso de lado de Putin también suicidándose políticamente. Solo la candidata de centroderecha sobrevive pero se ve improbable que puedan ganarle a Macron. La derecha está muy dividida y se quitan votos unos a otros, y la izquierda francesa está muerta (desde la centroizquierda hasta la extrema izquierda porque Macron es popular entre el voto progresista y los mata).
-Fue otro regalo electoral para Biden que estaba también padeciendo de una caída en popularidad que de pronto subió bastante y de cara a las elecciones de medio período. Los demócratas deberían estarle poniendo un altar a Putin en agradecimiento.
-Para quienes no fue un regalo fue para Matteo Salvini, la AfD alemana, Vox español y demás grupos de extrema derecha pro-Putin cuyas consecuencias se verán en futuras elecciones especialmente en Alemania e Italia. Años de inversión rusa en estas candidaturas desplomadas en pocos días.
-Alemania rompió décadas de pacifismo, triplicó su presupuesto militar, dio por cancelado el Nordstream 2, y decidió por primera vez en años dar apoyo militar a otro país (hasta entonces solo había participado en operaciones de mantención de la paz).