Gracias a la EUNED por rescatar un clásico: “El costarricense” de Constantino Láscaris
La obra ya se encuentra disponible en su más reciente edición en las librerías físicas y en la virtual de la EUNED.
Así es, gracias a la Editorial de la Universidad Estatal a Distancia de nuevo está disponible un libro clásico del ensayo y la investigación cultural de Costa Rica. Se trata del libro “El costarricense” de Constantino Láscaris.
“El mayor interés que encontré en el costarricense fue el de ser diferente. Y ese ser diferente es el que he procurado recoger”, escribe el autor en la contraportada del libro.
El gran valor de este libro es que nos muestra como somos, desde la mirada imperturbable de un extranjero embelesado por el país que lo recibe y le da cobijo. Constantino Láscaris Conmeno nació en Zaragoza, España en 1923 y laboró en la Universidad de Costa Rica de 1956 hasta el día de su muerte, en 1979. Por esa razón la mitad de su vida la tuvo en España y la otra en Costa Rica.
Era filósofo y docente universitario principalmente, pero también hizo de periodista, pero su vida de madurez intelectual la pasó más en el país centroamericano, donde nació su obra cumbre y más reconocida, “El costarricense“.
El libro es fundamental para los que los costarricenses puedan reconocerse a sí mismos, al menos en su identidad, en su ser, durante los inicios y consolidación del período conocido como la Segunda República.
La obra, que tuvo mucho realce en la época de los setentas y ochentas, había sido no olvidada, pero sí ignorada en la historia editorial del país y ahora la EUNED la recupera y nos la trae para disfrutar mucha de esa mirada al espejo de quienes fueron nuestros abuelos y quienes somos aún nosotros un buen poco.
Se trata de varios ensayos reunidos, contados como si fueran diario de viaje, pero que abarcan con seriedad muchas de las características que definen al tico: la habladera, los creyenceros, el vacilón, el folclore, el concho, la cosas a la tica y mucho más.
Este libro, a la par de varios ensayos de autores como Isaac Felipe Azofeifa (La isla que somos), Qué hora es (Yolanda Oreamuno), Abel y caín en el ser histórico de la nacionalidad costarricense (Abelardo Bonilla) y muchos más, son referencias obligatorias en el estudio de la idiosincrasia costarricense. Más recientemente, la obra “Así somos los ticos” de Geovanny Debrús J. y varios ensayos de autores vigentes como Carlos Cortés, se suman a ese esfuerzo permanente por darle alguna especie de identidad al costarricense.
No dude comprar este libro en las librerías de la UNED o también de forma virtual en este enlace (desde enero 2022) y sumarlo a su biblioteca, la lectura le resultará refrescante y de un gozo muy particular, el de reconocer un poco de sí mismo en esas páginas.