Ex directora: “En el Teatro Nacional lo que brilla sí es oro y si no es oro, es precioso”
Collado defiende extensamente que el sí hay un riesgo de incendio real, que el proyecto no es solamente para protegerlo de eso, sino para crear un sistema de salud integral para toda la edificación y que el edificio anexo no es un capricho
La ex directora del Teatro Nacional, Adriana Collado, expresó su desacuerdo con un artículo ampliamente difundido por los detractores del crédito para la restauración y escrito por la ex directora del Teatro Melico Salazar, Lina Barrantes.
El artículo de Collado, una opinión autorizada por conocer de primera mano la realidad de esta joya arquitectónica, fue publicado en Delfino.cr, pero ha sido divulgado también por WhatsApp.
“No hay que ver fantasmas donde no los hay y sí donde los hay”, concluye Collado en clara alusión al texto de Barrantes. El artículo de Barrantes ha sido divulgado por sindicatos y opositores políticos al Gobierno para oponerse al proyecto cultural.
Según Collado, circulan ideas equivocadas que expresan desconocimiento: “1. Que para financiar la Conservación del Teatro Nacional basta con destinar la recaudación del impuesto a los espectáculos públicos, 2. Que hay mala administración, 3. Que el TNCR es una institución llena de burócratas, 4. Que el riesgo de incendio es un chantaje, 5. Que hay sobreprecios y 6. Que el edificio anexo es innecesario”.
Collado argumenta que es incomparable una instalación eléctrica o contra incendios en el Teatro Nacional que una en el Melico Salazar y explica como durante 5 administraciones (una del PUSC, dos del PLN y dos del PAC) se fue formando el proyecto que hoy tiene una segunda oportunidad en la Asamblea Legislativa.
“La sugerencia de financiar el proyecto con recursos propios no resulta factible, ni alquilando más la sala ni usando todo lo recaudado por el impuesto a los espectáculos públicos”, indica Collado en el artículo.
Collado defiende extensamente que el sí hay un riesgo de incendio real, que el proyecto no es solamente para protegerlo de eso, sino para crear un sistema de salud integral para toda la edificación y que el edificio anexo no es un capricho, sino que es producto de una necesidad para albergar el archivo histórico y otros espacios importantes.
Por otra parte, la ex directora explica cómo las diferencias son abismales entre hacer un arreglo en el Melico Salazar y el Teatro Nacional, por las características de ambos edificios, su antigüedad y los materiales que los conforman.
De ahí su frase: “En el Teatro Nacional lo que brilla sí es oro y lo que no es oro, es precioso”, en alusión a que ese edificio es literalmente una joya, porque muchos de sus componentes son de oro y de otros materiales preciosos de alto valor, además de la colección de arte que lo conforma y que tiene una gran valor económico, patrimonial e histórico.
Además, como se comprueba en este artículo de William Martínez Pomares con datos oficiales, el texto de Lina Barrantes aportó datos imprecisos sobre el Teatro Nacional para fundamentar sus criterios.
Lea el artículo completo con explicaciones a fondo en este enlace.
Foto: Web del Teatro Nacional.