El “Social Friday” y una empresa motivada con incentivos laborales
Los incentivos laborales son fundamentales cuando se realizan natural y genuinamente.
Las empresas modernas y con responsabilidad social no consideran a sus servidores como un costo, sino como una oportunidad de crecimiento, por eso los incentivan y promueven incentivos laborales de acuerdo con sus talentos y sus méritos.
Los negocios que se proyectan con una visión real de servicio a la sociedad, a la comunidad, entienden mejor que los primeros beneficiados de esa responsabilidad social son sus propios empleados.
La Encuesta Global de Tendencias y Beneficios de Willis Towers Watson (WTW) encontró que la mejora del bienestar de los empleados (mencionada por el 69%) y su retención (por el 48%), son las principales medidas de éxito por parte de los empleadores en América Latina.
Incentivos laborales y motivación natural
Hay empresas, por ejemplo, donde tienen iniciativas como el “Social Friday” (por ponerle un nombre), donde las personas pueden asistir sin uniforme al trabajo –u otro beneficio- con tal de donar una cantidad de dinero para una obra de bien social. Como este ejemplo, esas expresiones hacen sentirse a los servidores como personas útiles para el crecimiento de la empresa, pero también para el servicio de la comunidad.
Las tensiones del trabajo y la vida cotidiana, de la rutina misma, se alivian notoriamente cuando los servidores de una empresa sienten más encanto cuando van a trabajar, y no solamente lo perciben como una obligación.
En algunas empresas también tienen programas de reciclaje para que la gente adquiera el hábito e incluso lo lleven a sus hogares.
Las capacitaciones son normalmente aceptadas con recelo, pero una empresa que motiva sobre las maravillas de aprender cosas nuevas y que sean de utilidad cultural y social, normalmente logra un sentimiento de agradecimiento entre los funcionarios que mejora el ambiente laboral.
Hay muchas mejoras posibles cuando se tiene inventiva y se buscan innovar, más allá de solamente cumplir con un deber. Incluso los servidores que vayan a su trabajo como una obligación inevitable, en algún momento empiezan a experimentar bienestar cuando el lugar de trabajo se convierte en un espacio de metas, retos y logros que motivan.
La gran diferencia entre un emprendimiento comercial pequeño o mediano y una gran empresa puede radicar en la emocionalidad con que las personas realizan su trabajo. Hay pequeñas empresas que logran crecer gracias a esos retos que se forman y emocionan, pero cuando crecen olvidan la importancia de preservar esa emocionalidad y empiezan a forzar las cosas, el principio de la decadencia.
Salud mental y desempeño
Un “Social Friday”, un programa de reciclaje real y activo, campañas para ayudar a los compañeros de trabajo con dificultades económicas o humanas, actividades deportivas y artísticas, así como incentivos inesperados para quienes se desempeñan mejor según los datos concretos y objetivos, son algunas posibilidades que se pueden implementar para mantener una ambiente sano en el trabajo.
Todo lo anterior redunda en la salud mental, así como en la física de quienes llevan las riendas del negocio. La salud mental es también fundamental para mantener una baja rotación laboral y un mejor desempeño en las diversas labores asignadas.
En el contexto de la pandemia por el virus SARS-Cov-2 todo el panorama laboral cambió y fue necesario el trabajo a distancia o virtual, una situación que afectó notablemente la emocionalidad de las personas y, en algunos casos, afectó directamente el desempeño. No obstante, también significó una oportunidad, mediante la resiliencia, para lograr y dirigir nuevos desempeños y ostentar nuevas capacidades en los empleados.
La pandemia dejó mucho dolor y causó mucha incertidumbre en las personas, pero también abrió un abanico de oportunidades sobre las nuevas tecnologías y sus alcances para facilitar labores que, posiblemente, antes eran engorrosas o no estaban claras. Además, se pueden escoger mejor las capacitaciones que son requeridas para superar esas dificultades. Una empresa motivada, con salud mental y claridad en las funciones que realizan sus funcionarios, puede lograr un crecimiento acelerado incluso más allá del proyectado en los planes originales.