Por Gustavo Adolfo Araya*. Nuevo estilo gerencial: no puedo arreglar la empresa, es que ya venía mal. Lo que puedo hacer es empeorarla aún más y así nos aplauden quienes odiaban al gerente anterior. Eso sí, digamos que las cosas buenas son nuestras, aunque vienen de antes.

Att, el gerente mediocre.

PD: No hay que preocuparse, el nuevo estilo gerencial viene con entretenimiento variado, inversión en imagen, plataformas de desinformación y, si hace falta, se hace acompañar de apoyo digital internacional, además de algunas voluntades violentas, persecución y uso de la institucionalidad para la venganza.

El gerente mediocre se hace acompañar de un equipo profesional en fanfarria, fuegos artificiales, distracción a granel y enseñanza profesional en mentir. Es el más nefasto y peor-mejor departamento de mercadeo y ventas de la historia.

La diferencia (enorme) es que a los gerentes mediocres se les despide, en democracia hay que soportar el daño y mientras tanto también pagar la orquesta de gozo y manipulación que trae consigo.

Mientras tanto todo el desastre es pagado con impuestos, a la mirada del empresariado que aplaude el show sin darse cuenta que el barco se hunde, los sindicatos salvan las pertenencias propias y la población cree que habrá botes para todos.

* El autor es politólogo y profesor universitario. Tiene posgrado y es especialista en Comunicación Política.