En los Ebais y clínicas de la Caja Costarricense del Seguro Social la regla es que cada médico debe atender 5 pacientes por hora desde el año 2004, aunque cuando la costumbre viene aplicándose desde los noventa del siglo pasado.
Entonces, según explica la CCSS, “el promedio de atención primaria está entre 12 minutos y 15 minutos, aunque se sabe que las consultas de control, que incluye el reporte de exámenes y la emisión de una receta, tienen un estimado de ocho minutos mientras que las consultas más complejas pueden llegar a tener un estimado de 17 minutos”.
Según la entidad, doce minutos son suficientes para consultas en países en desarrollo, sin que eso merme la calidad del servicio a los asegurados, ni signifique una sobrecarga laboral para los galenos.
Desde mayo de 2004 existe ese acuerdo que también avalan los sindicatos, pero que no es inamovible. En el momento de establecerlo, quedó claro que la CCSS “no podrá ser reformado por parte de la Caja, salvo que previamente el proyecto específico de reforma haya sido concertado con los sindicatos suscribientes.”
Por eso, no es extraño que cuando usted visita un centro médico de la CCSS note a los médicos apresurados, mientras escuchan y escriben en el sistema integrado de datos de la institución mediante una computadora, sin oportunidad en muchas ocasiones de revisiones más profundas.
Sin embargo, los usuarios y algunos doctores reclaman que la atención primaria supone también exámenes como el papanicolau, palpación o múltiples revisiones que, evidentemente, necesitan más tiempo. Por eso a veces muchas personas no reciben la atención necesaria para sus casos, porque se conduce al médico a una consulta superficial.
La CCSS defiende ese tiempo argumentando que “en países menos favorecidos con el 50% de la población mundial el promedio de consulta son 5 minutos o menos, tiempo que se explica en función de sus limitados recursos con baja capacidad resolutiva”.
“En Costa Rica las consultas más frecuentes ocurren por diarreas y gripes, lo cual se consideran de trámite más rápido y el segundo componente de consulta frecuente es el de control de pacientes con enfermedades crónicas, las cuales son de trámite dentro de lo establecido de los a introducción del estándar de calidad de 10 min para las citas programadas de rutina, una cifra similar a la usadas en Reino Unido y Australia, por ejemplo”; defiende la CCSS mediante un comunicado.
En oportunidades, según constantes reclamos, pacientes que fueron atendidos con el prejuicio de ser una atención común terminan por volver a los servicios de emergencias e incluso ven agravada su condición de salud por la premura con que son vistos.
La CCSS defiende que en casos más complicados el médico puede usar más tiempo, pero que ese tiempo se reduce en otras consultas más rápidas, de manera que se establece un promedio que debe completar, en una hora a los 5 pacientes.
“El promedio de la consulta de doce minutos para paciente subsecuente significa que hay casos en los cuales la consulta es muy rápida y otros en los cuales la atención es más lenta, por eso debe entenderse como un número que permite la organización del sistema y no un número de minutos asignados por paciente”, explica la entidad.